Campaña del miedo II

En la campaña electoral de 2015, el macrismo se apuntaló básicamente en la muerte del fiscal Nisman, acusando a Cristina de asesina, además de seguir acusándola de chorra, y de mantener vagos; sin embargo se victimizaron haciéndole creer a la población que el kernerismo estaba impulsando una "campaña del miedo". Se referían a las predicciones de dirigentes y militantes, advirtiendo sobre la decisiones que tomaría el gobierno de Macri en caso de ganar la elecciones.

Por supuesto que solo bastaba con conocer un poco la historia, sus protagonistas, sus ideas e intereses, para deducir cuales serian las políticas que llevarían a cabo, pero con márquetin vacío, con imágenes y testimonios que apuntaban a la emocionalidad, ocultando sus intenciones y mintiendo descaradamente en sus acusaciones hacia todos los funcionarios de Cristina, con el apoyo incondicional de los principales medios de comunicación, y el poder económico nacional e internacional en pleno, lograron convencer a un sector social, suficiente para apenas alcanzar la victoria en la segunda vuelta contra Scioli, que no logró despertar entusiasmo ni en los propios.

Tan fácil era interpretar que camino tomaría el gobierno de Macri, que con repasar los nombres de los dirigentes que lo acompañaban, se podía ver que los mas rancios menemistas y delaruistas, que habían destruido nuestro país se habían congregado alrededor del mafioso contrabandista. No cabía ninguna duda de que iban ajustar, desregular, devaluar, endeudar, fugar, que iba a haber tarifazos, que iba a subir la desocupación, que iban a cerrar pymes industriales y comercios. Sin embargo se encargaban de negarlo en publico (en privado se les escapaban sus reales intenciones), decían que solo iban a cambiar lo que estaba mal...

Los cuatro años de gobierno se encargaron de darnos la razón, aunque en parte, porque nos quedamos muy cortos, no estaba en nuestros planes, la represión brutal, la persecución política/judicial, la intervención mafiosa en el Poder Judicial, los cierres, despidos, y hasta encarcelamiento de integrantes de medios opositores, los sistemas de espionaje a propios y extraños, la participación en el Golpe de Estado en Bolivia, la desaparición seguida de muerte de Santiago Maldonado, el asesinato de Rafael Nahuel, el hundimiento del ARA San Juan y posterior espionaje a las familias de las victimas, y ya para cerrar el ciclo, la corrida cambiaria fruto del endeudamiento desbocado y la vuelta al FMI.

El regreso del Peronismo al gobierno, esta vez en una coalición muy diversa, no dio las respuestas que esperaba el Pueblo, por múltiples razones, justificadas (Herencia macrista, Pandemia, Guerra en Ucrania, condicionamientos Institucionales) o no, esto habilita la posibilidad de que se pueda reeditar un nuevo Gobierno macrista/radical.

A 8 años de aquel 2015, la realidad es muy distinta, el clima anti-política y por ende anti-estado goza de cierto predicamento, a eso se suma una ola internacional de derechización, aprovechada por dirigentes que la fogonean, basándose en el descontento popular que produce la insatisfacción democrática. Tal como sucedió un siglo atrás, la falta de respuestas de la Democracia liberal,  

dio nacimiento a los movimientos totalitarios de extrema derecha. Hoy son movimientos absolutamente individualistas, se hacen llamar libertarios, aunque la única libertad que persiguen es la del dinero.

Este cambio de clima de época, habilitó al macrismo a mostrarse tal cual es. En este 2023, la campaña del miedo, la hacen ellos, ya no les da vergüenza, sus propuestas, eso creen, miden en la población. Entonces ahora sus promesas de campaña, son amenazas, que muchos confundidos reciben con beneplácito. Sus votantes se dirigen directamente al matadero con alegría, veremos si es tan así.

Ellos presentan sus horribles propuestas, como ajustes salvajes en el Estado, despidos, privatizaciones, eliminar planes sociales (que luego los deben aumentar ante el crecimiento de desocupados), mano dura, cárcel y/o desaparición de la fuerza política opositora, librecambismo (devaluación alevosa, endeudamiento y fuga), libre comercio (cierre de industrias), reforma previsional (baja de jubilaciones), flexibilización laboral (recorte de derechos a los trabajadores) alineación automática con la geopolítica de EEUU, certidumbre para el capital e incertidumbre para el trabajador, etc.

Es el deber de todo patriota desenmascarar las consecuencias de las propuestas gorilas (macristas, radicales, libertarios, etc.) todas y cada una nos conducen a una mayor dependencia, atraso, a una Nación mas chica, mas pobre, mas desigual, menos libre y soberana, mas alejada de nuestros hermanos latinoamericanos, con peores condiciones de vida para nuestro Pueblo.

En nuestra Historia están las respuestas, si nuestra Patria no está aun liberada, si no somos un país desarrollado, no es por culpa de "70 años de Peronismo", es porque los ciclos Nacionales y Populares fueron interrumpidos constantemente, porque las políticas soberanas solo tuvieron lugar en 1946-1955 y 2003-2015, porque en el resto de los años se aplicaron las recetas ortodoxas de los centros de poder económico ajenos a nuestros intereses como Pueblo Argentino.